Subida al pla de la calma:
El viernes bién tempranito montamos las bicicletas en el coche de Julián, parece que comienza a hacer fresquillo por la mañana.
Ponemos rumbo a Aiguafreda que es donde comienza la ascensión, a ver que tal se da el dia.
Cruzar el pueblo nos lleva cinco minutillos y aqui se acaba el asfalto, a partir de aqui pista .
Esta pista en principio va llaneando y el firme es bastante bueno, curva a la derecha y comienza la ascensión, la cual no tiene ningún misterio, pendiente constante y con piedra suelta pero nada del otro jueves, al menos a la hora de subir.
Julián me está humillando, yo no soy capaz de seguirlo por lo que se me escapa, se escapa, se escapa......hoy no paso de 5 o 6 km/h y asi sigue la cosa, yo al tran tran con la cabeza gacha sin ver nada del paisaje a no ser que las piedras del camino se cuenten como paisaje.
Julián ya ha llegado a la primera parada que es la masia del CLOT aqui parada y descansamos unos diez minutillos antes de seguir, fotillos.
Ya que estamos cerca de una iglesia que se ve al lado decidimos echar un vistazo.
En el GPS marca como iglesia de Sant Cebrià pero en la puerta está marcada como iglesia de la Mora.
Después de esto hay que seguir un poquillo más hacia arriba y llegamos a la intersección de caminos que nos lleva hasta Collformic, que esperemos que esté abierto el bar a ver si podemos comer algo.
Llegar es bastante fácil y que solo encontramos un tramo de subida, eso si. si estás tocado se hace eterna, a partir de aqui todo bajada hasta el bar.
Comemos un poquillo, sin mucho exceso que luego pasa lo que pasa. ahora hay que decidir si volvemos por donde hemos venido o por el contrario tiramos dirección al Brull que es hacia el otro lado y todo bajada.
Vista la hora que es y que no estoy muy seguro de recordar el camino desde el Brull hacia Aiguafreda, por lo que decidimos volver sobre nuestros pasos.
Ahora se trata de desandar el camino, lo que antes era subida, ahora es bajada por lo que hay que ir con cuidadín ya que el terreno tiene piedra suelta y algún regerón y lo que a la subida eran los 5 o 6 km/h me ha dado un pico de 43,9 km de bajada, benditos frenos, tendremos que ponerle una velita a San Avid Juicy.
Pués lo dicho, llegamos abajo en un plis, sin ningún contratiempo, nos hacemos la fotillo al lado de un pantanillo que hay al lado del camino y para casa.
Montamos las bicis en el coche de Julián y hasta la próxima.
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